¿Por qué tu empresa debe tener identidad corporativa?
Qué es la identidad corporativa
La identidad corporativa de una empresa es como la identidad personal es a las personas, tienen un carácter, unos valores y una determinada forma de hacer las cosas, de realizar sus servicios o producir sus productos. La identidad corporativa es la razón de ser de una empresa. Es todo lo intangible que nos aporta y ese no sé qué por el que nos hacemos fieles consumidores de sus productos o servicios.
El diseño de una buena identidad corporativa ayuda a nuestra empresa a adquirir notoriedad y diferenciación frente a la competencia, lo que aumenta favorablemente la decisión de compra sobre lo que queremos vender.
La experiencia de compra
Normalmente las marcas quieren que sus potenciales clientes perciban sus productos o servicios como «calidad». Pero muchas veces es difícil demostrar la calidad de un producto antes de adquirirlo. Por ello, es importante conseguir que la experiencia del usuario en el proceso de decisión y compra sea la mejor posible. Esto ayudará a la decisión de compra.
¿Cómo mejorar la experiencia de compra mediante la identidad corporativa?
Lo primero es planear una buena estrategia para el diseño de la identidad corporativa de nuestra empresa. No solo en cuánto aspectos visuales, sino también de personalidad. Es necesario establecer el tono en el que te dirigirás a tu target y definir una filosofía corporativa (misión, visión, valores y cultura) y acoplar los procesos de tu empresa a dicha filosofía y tono. En definitiva, todo lo que pueda sumar para convencer a nuestro comprador.
Los clientes ya no compran productos, si no marcas y experiencias.
Para ello debemos contar también con creatividad y un buen diseño. Un negocio con un diseño cuidado y que va en sintonía con su identidad, transmite la sensación de mayor calidad y fiabilidad. A todos nos gustan las cosas bien hechas. Si quieres ver como realizar un buen logotipo para tu empresa, pincha aquí.
Una vez establecida nuestra identidad corporativa, podremos proceder a diseñar una campaña de comunicación y de publicidad que nos ayude a conseguir notoriedad. Todo ello basado en una base veraz y coherente, y sobretodo con una continuidad en el tiempo que asiente las bases de la identidad de la marca. Es por ello que es importante planificarlo bien desde el principio y evitar ofrecer malas experiencias a nuestro público.
Se trata, en definitiva, de conseguir una buena comunicación con nuestro público objetivo.
